Consideramos pertinente referirnos a las notas tituladas “Sin palabras”, “Honorarios” y “La carta” (El Espectador, “Alto Turmequé”, 01/21/2018) en las que se menciona a la Sociedad Colombiana de Ingenieros -SCI-, haciendo referencia al Premio Nacional de Ingeniería otorgado en el año 2010, al nombramiento como presidentes honorarios de la SCI a los presidentes de la República en ejercicio, y a una carta solicitando rectificación a la SCI, suscrita por la vicepresidencia de la República y entidades del Ministerio de Transporte.

El Premio Nacional de Ingeniería 2010 que se otorgó por los “estudios y diseños de la doble calzada en el sector Cáqueza-Chirajara, de la carretera Bogotá-Villavicencio”, que incluye 480 metros del Puente Chirajara, se sustentó en la innovación de un diseño de un tramo de 30 kilómetros de segunda calzada y otros 15 km de intersecciones y retornos, con 18 túneles e igual número de puentes y viaductos, que rompió el paradigma de que en Colombia era imposible realizar carreteras de montaña de este tipo; gracias a este ejemplo, puesto de relieve con su premiación, en Colombia estamos abandonando la práctica de construir carreteras principales a media ladera, vulnerables e inseguras para los usuarios debido a los derrumbes propios de cada época invernal y a la geometría curvilínea de las mismas laderas.

El objetivo del Premio Nacional de Ingeniería es presentar ejemplos de innovación técnica que sean buenas prácticas de ingeniería. En este caso no se debe afirmar que el premio condecora una parte específica de la obra, sino que fue galardonado por el modelo de diseño para vencer las dificultades y complejidades de nuestra topografía, cambiando la concepción de la infraestructura vial en Colombia, particularmente en zonas montañosas. Estamos convencidos que hoy, los usuarios de la vía que la transitan por primera vez, se sorprenden gratamente y gozan con la sensación de seguridad y confort mientras circulan a 80 km/h por el tramo de la vía que se encuentra en servicio correspondiente a ese diseño. Algunos no dudan en calificarla como un atractivo turístico por sí sola.

Referente a la segunda nota queremos aclarar que los estatutos de la SCI establecen que los presidentes de la República son presidentes honorarios natos de la agremiación, por lo que los nombramientos del Dr. Álvaro Uribe Vélez y del Dr. Juan Manuel Santos Calderón se dieron en cumplimiento de orden estatutaria, como un reconocimiento expreso de la SCI a la institucionalidad de la Presidencia de la República, independiente de cualquier consideración de índole política.

En cuanto a “La carta”, como se indica, el sector de infraestructura de Transporte Nacional reaccionó a un pronunciamiento de la SCI del que no era destinatario. La SCI presentó el resultado de un estudio llevado a cabo en los últimos tres años y medio para esa fecha, el cual se ha seguido actualizando, que calificaba la transparencia de la contratación regional de todos los municipios y departamentos del país, por lo que no procedía rectificación alguna. Lo lamentable fue que los verdaderos destinatarios del pronunciamiento de la SCI guardaron absoluto silencio y total inacción al respecto, por lo que a la fecha nos toca reiterarnos en que, con contadas excepciones, en las entidades regionales no hay voluntad política para combatir la corrupción.

Confiamos que esta nota contribuya a que sus apreciados lectores puedan tener la información de contexto que le permita formarse una opinión adecuada al respecto, y a preservar la imagen y el prestigio de la SCI forjada a través de sus acciones en 130 años de existencia.

Aprovechamos para informarle que se encuentra abierta la convocatoria para otorgar los premios a la Ingeniería Nacional año 2018. Sus bases pueden ser consultadas en nuestra página web: www.sci.org.co, pues es nuestro deber, y en algunos casos nuestra obligación por mandato legal, resaltar la importante contribución de la ingeniería nacional, exaltando su vida y obras destacadas. Estas superan en mucho las pocas obras que, a nuestro pesar, han presentado lamentables tragedias.

Argelino J. Durán Ariza.
Presidente de la Sociedad Colombiana de Ingenieros.