La iniciativa, denominada “Toyota Alabang Kids Tech”, es un convenio entre escuelas y empresas del sector que busca brindar a las niñas una experiencia práctica y enriquecedora. A través de este programa, las estudiantes tienen la oportunidad de visitar plantas de producción, interactuar con ingenieros y conocer de cerca el proceso de diseño y fabricación de automóviles. Con ello, se espera no solo despertar su interés por la ingeniería, sino también fortalecer sus habilidades en resolución de problemas, pensamiento lógico y trabajo en equipo, aspectos fundamentales para cualquier disciplina STEM.

Además, participan en talleres y actividades lúdicas donde aprenden sobre los principios básicos de la mecánica, la electrónica y la aerodinámica, siempre adaptados a su nivel de comprensión. Las actividades se diseñan para fomentar la experimentación, permitiendo a las niñas construir prototipos, explorar materiales y comprender de forma tangible el funcionamiento de distintos mecanismos. De este modo, la enseñanza se aleja de los modelos tradicionales y se centra en el aprendizaje basado en la práctica, lo que refuerza su confianza y autonomía.

El programa también incluye charlas con mujeres ingenieras y profesionales del sector, quienes comparten sus experiencias y motivan a las estudiantes a visualizar un futuro en la industria automotriz. Este componente es clave para romper estereotipos de género y demostrar que la ingeniería no es una profesión exclusiva para los hombres, sino una disciplina en la que el talento y la creatividad no tienen género.

Al ser uno de los países con industrias automotrices más robustas del mundo, Japón busca formar a los futuros ingenieros y científicos que impulsarán la innovación y el desarrollo tecnológico del país. La apuesta por la educación en edades tempranas se perfila como una estrategia efectiva para garantizar un futuro con mayor diversidad en la fuerza laboral y una mayor equidad en el acceso a oportunidades en el sector.

El impacto de este programa se espera sea significativo en el mediano y largo plazo, con una generación de jóvenes más interesadas en estudiar carreras relacionadas con la ingeniería. Asimismo, podría servir como modelo para otros países que buscan fomentar la participación femenina en industrias tradicionalmente dominadas por hombres y potenciar el desarrollo tecnológico desde las bases del sistema educativo.

Fuente: Toyota Alabang Inc.